Cómo y en qué medida involucrar a los mayores en Navidad
Es Navidad, días de fiesta en familia. Nos gustaría que las personas mayores se involucren, aunque a veces no tienen muchas ganas de participar. ¿Cómo y en qué medida debemos insistir? Te damos las claves.
En la época de la Navidad y las fiestas de fin de año proliferan las celebraciones y fiestas en familia y con amigos. Sin embargo no todo el mundo siente las mismas ganas de festejar.
Muchas veces las personas mayores están tristes, cansadas o se sienten enfermas. Además las tradicionales cenas son muy tarde, son copiosas y pueden acarrear digestiones pesadas. ¿Qué hacer?
Nuestro sentido de pertenencia al grupo nos dice que todos tenemos que participar en las fiestas, pero debemos manifestar empatía y preguntar a nuestros familiares mayores si ellos desean celebrar y cómo desean hacerlo.
Es normal que animemos a nuestros mayores a participar en las fiestas de Navidad, pero debemos respetar sus deseos, sentimientos y rutinas y no insistir. Así pues, planearemos las celebraciones contando con ellos y sus deseos.
Plan b para involucrar a los mayores
- Poner un horario prudente para la cena de Nochebuena, que no sea mucho más tarde de lo habitual para no cambiar en exceso las rutinas pero que se note que es un día especial.
- Preparar un menú pensando en todos los miembros de la familia, evitar aquellos alimentos muy pesados u ofrecer alternativas para aquellos que tengan alguna enfermedad o intolerancia.
- Respetar sus deseos de cenar como otro día cualquiera y en su lugar, animar a participar en la comida de Navidad y la del primer día del año.
- Incentivar: es verdad que a veces las personas mayores no tienen muchas ganas de celebraciones, todos nos ponemos un poco melancólicos en la Navidad, pero no está de más animar a nuestros mayores a romper la monotonía del día a día celebrando estas fiestas. Si hay niños, ellos son un reclamo estupendo para los mayores.
- Lo más importante: Escuchar: preguntar a las personas mayores por sus preferencias y gustos de comida y horarios, encargarles tareas sencillas que les permitan sentirse útiles, o animarles a cocinar el plato preferido de la familia, les servirá de estímulo.
Como ves son recomendaciones de sentido común, que las personas mayores agradecerán, pero lo más importante es respetar sus deseos, tratar de comprenderles y aceptar.
La Navidad es un tiempo especial y lo más importante son las personas. No olvides estos consejos e involucra con cabeza a los mayores en las celebraciones de Navidad.